El primer grupo, integrado por el reanimador Máximo Uribe, el técnico paramédico Jhonny Moncada y el conductor Héctor Ruminot, se trasladó a la zona el jueves 26 de enero, a bordo de una ambulancia avanzada para prestar ayuda a las unidades de rescate que atendían la catástrofe en la región.

Los funcionarios fueron enviados no sólo con sus implementos para brindar atención de salud, sino además con un equipo de comunicación satelital. Una vez en la zona, se pusieron a disposición de sus pares del Maule, quienes los enviaron a Constitución para realizar atenciones en albergues, lugares afectados y trasladar pacientes a diversos centros asistenciales.

El relevo

Este primer equipo fue relevado el lunes, luego de 72 horas de trabajo, por un segundo equipo compuesto por Arnaldo Torres (conductor), Mario Martínez (técnico paramédico) y Patricio Saavedra (reanimador), quienes se trasladaron a la ciudad a bordo de una moderna ambulancia 4×4, transporte adquirido a fines de 2016 para prestar ayuda en terrenos difíciles. También fueron a la zona el jefe de Intervención, Julio Barreto y nuestro sicólogo, Miguel Parada.

El Director del SAMU Metropolitano, Dr. Fernando Araos Dattoli, destacó sobre este despliegue que “nosotros ofrecimos ayuda desde el primer momento, y cuando el SAMU del Maule y la Subsecretaría de Redes y Emergencias y Desastres del Ministerio de Salud nos solicitaron apoyo, decidimos partir de inmediato”.

“No podemos restarnos de una causa que afecta a tantos chilenos. En esto estamos todos involucrados, independiente de si estamos o no afectados directamente por este desastre”, afirmó. Asimismo, recalcó la importancia de entregar ayuda de manera ordenada y ponerse a disposición de los equipos de gestión de emergencia, ya que ir a la zona en estos momentos sin una logística adecuada puede significar arriesgar la vida.